La hipercolesterolemia o colesterol alto se produce cuando sus niveles en sangre son altos causando así factores de riesgo para nuestra salud. Entre ellos pueden ser factores genéticos, pudiendo heredar genes que aumentan la producción de colesterol, factores ambientales como dieta rica en grasas, estilo de vida sedentario, la falta de actividad física regular, pueden contribuir a niveles altos de colesterol, como también la obesidad, edad y género, consumo de alcohol y tabaquismo.
La hipercolesteromia generalmente no presenta síntomas específicos pero es muy peligrosa ya que puede provocar complicaciones graves como enfermedades coronarias, cerebrovasculares y cardiovasculares.
Para su diagnóstico necesitaremos realizar un analísis completo de sangre, donde incluya el colesterol total, colesterol HDL ("bueno), colesterol LDL("malo") y los triglicéridos. Para el tratamiendo farmacológico usaremos los medicamentos como estatinas, inhibidores de la absorción de colesterol y otros fármacos que ayuden a bajar los niveles de colesterol. Para ayudar a controlar los niveles del colesterol y reducir el riesgo de complicaciones debemos de adoptar un estilo de vida saludable, dieta equilibrada baja en grasas, ejercicio físico y evitar el consumo excesivo de alcohol y tabaco.